me siento debil, el sentimiento inevitable, este instinto insaturable que me exige la natura. el escudriño constante en mi interior por parte de algún pasajero enajenado no deja de molestar, y crecen insatisfechas mis ganas de matar. matar o morir. dejar de existir muriendo, o matando

No hay comentarios:

Publicar un comentario