HAY UN LUGAR PARA MÍ?
y de repente repelemos los impulsos que nos dicta la materia gris.
y amanecemos sin muchas ganas de sonreir.
y dormimos cantando. y vivimos bailando.
quedan tantas sonrisas en el vacío de la noche, tantas lunas hacedoras de reproches.
heladeros con sombreros austronáticos que me guiñan un ojo.
guitarristas con manías ricoteras tocan temas de los piojos.
terminamos dandonos por vencidos, ASUSTANDO a los vecinos

Deseo poco y lo poco que deseo lo deseo poco.

Vuela bajo porque abajo está la verdad, esto es algo que los hombres no aprenden jamás